Las casas de la carta astral indican diferentes aspectos de la vida de una persona. En función de cada una de ellas, se puede obtener información detallada de áreas concretas y obtener una imagen clara de su manera de afrontar la vida. Desde la Academia de Astrología queremos ofrecerte una explicación sobre qué significan las casas de la carta astral y cómo influye en la identidad de una persona.
¿Qué encontrarás aquí?
- 1 ¿Cuáles son las casas de la carta astral?
- 1.1 Primera casa (Ascendente)
- 1.2 Segunda casa
- 1.3 Tercera casa
- 1.4 Cuarta casa (Fondo del cielo)
- 1.5 Quinta casa de la carta astral
- 1.6 Sexta casa de la carta astral
- 1.7 Séptima casa (Descendente)
- 1.8 Octava casa de la carta astral
- 1.9 Novena casa de la carta astral
- 1.10 Décima casa (Medio cielo)
- 1.11 Undécima casa
- 1.12 Duodécima casa
¿Cuáles son las casas de la carta astral?
Cada casa de la carta astral gobierna una esfera específica de la vida, desde la personalidad hasta la comunicación, las emociones, la diversión, las responsabilidades… Veamos cada una de ellas con detalles:
Primera casa (Ascendente)
La primera casa es la más importante y se llama ‘Ascendente’. Representa el aspecto físico del individuo, la forma del cuerpo, cómo se mueve y gesticula… Pero no sólo se centra en la apariencia, sino que también indica el papel que mejor personifica, su identidad, la personalidad y la imagen propia.
El Ascendente se asocia con la salud y la vitalidad. Tradicionalmente, también se le llamaba ‘Casa de la Vida’ e influía mucho en la personalidad y en la imagen que perciben los demás de nosotros. Cada ascendente nos da la pauta de asuntos que serán importantes en la vida de la persona, sus intereses, motivaciones o vínculos.
Segunda casa
La segunda casa se relaciona con el dinero, los valores, los recursos y la autoestima. Gobierna todo lo relacionado con la seguridad material y los bienes. Representa todo lo que la persona llama “Mío”, en una materialización de la energía personal y de la libido en algo físicamente real.
Es el lugar en el que dirigimos nuestra energía hacia algo tangible, que se puede tocar o utilizar. También se considera que es la puerta de entrada a nuestro instinto de supervivencia, el alimento para saciar el hambre energética, lo que nos fortalece y hace posible nuestra manera de pensar.
Tercera casa
Se enfoca hacia la comunicación, el aprendizaje, los hermanos y el entorno cercano. La tercera casa representa cómo nos expresamos y nos comunicamos con los demás. Indica los mecanismos intelectuales que empujan a una persona hacia una dirección.
Esta casa se considera la puerta del conocimiento, la distinción de las cosas, la base para construir el sentido de comunidad. Puede mostrar características relacionadas con la escuela, el rendimiento o incluso el acoso por personas del entorno como compañeros, parientes o hermanos.
Cuarta casa (Fondo del cielo)
La cúspide de la cuarta casa está en el llamado “Fondo del Cielo”. Es la segunda casa angular en la carta astrológica y representa los orígenes del individuo. En ella encontramos su pasado, las raíces emocionales, psíquicas, genéticas, familiares y físicas, así como los hábitos y percepciones formadas tempranamente en la vida.
También se la conoce como “Casa del Hogar”, y es la puerta de entrada al análisis de temas propios de nuestro hogar físico: la casa, la comunidad o la ciudad, y también al concepto de refugio, protección y personas afectuosas. Esta casa afecta poderosamente a nuestro inconsciente y a aquello que amamos.
Descubre más: Esta es la relación entre constelaciones, horóscopo y signos zodiacales.
Quinta casa de la carta astral
La quinta casa está vinculada a la creatividad, el romance, los hijos, el placer y la autoexpresión. Gobierna todo lo relacionado con la diversión, el entretenimiento y la alegría de vivir. Se trata de una de las casas más importantes para la interpretación astrológica, aunque a menudo queda relegada a un análisis más ordinario.
Lo cierto es que la casa 5 es el complemento para el análisis del Sol personal; está relacionada con la espontaneidad, con aquel lugar en el mundo que nos atrae, que nos aporta bienestar. En resumen, es todo lo que tiene el potencial de hacernos felices y creativos, todos los placeres de la vida.
Sexta casa de la carta astral
Está relacionada con la salud, el trabajo, el servicio, las rutinas diarias y las mascotas. Representan las responsabilidades y las obligaciones cotidianas, aquellas tareas de limpieza y mantenimiento que asociamos a nuestro día a día más rutinario. En otras palabras, la sexta casa se vincula con la manera en que nos desenvolvemos en el entorno cotidiano del lugar donde trabajamos.
No hay que confundir lo que representa con el éxito, la carrera o la reputación, puesto que estos están gobernados por otra casa. Esta, la sexta, se encarga del acto de servir y el trabajo diario. Se ocupa de aquellas tareas que por lo general no nos gustan, pero que hay que hacer para garantizar el funcionamiento del día a día.
Séptima casa (Descendente)
La séptima casa se conoce también como el “Descendente” y se enfoca en las relaciones personales, el matrimonio y los socios comerciales. Representa las interacciones más cercanas con los demás en los distintos ámbitos, por lo que no se vincula solamente a las relaciones de pareja.
Así, define las relaciones que mantenemos con cada persona, el compromiso con ellos y cómo vemos la sociedad. En algunos casos, es un aspecto del individuo reflejado en otras personas con las que se relaciona.
Octava casa de la carta astral
Esta casa conlleva un peso psicológico fuerte, ya que está vinculada con las relaciones íntimas y las grandes transformaciones emocionales que conllevan. Es el lugar en el que ocurren las crisis y los cambios. La casa ocho hace tangible el compromiso de la séptima.
Es decir, que esta casa se refiere a cuestiones existenciales: enfermedades graves, peligros, miedo a la muerte, implicación sexual, reproducción, deudas… Son asuntos serios. Gobierna, en resumen, todo lo relacionado con cambios profundos y experiencias transformadoras.
Novena casa de la carta astral
Se asocia a la novena casa con la búsqueda de significado, lo que incluye la filosofía, la religión, los viajes largos y la educación superior. Representa nuestras creencias y cómo vemos el mundo. Se ocupa de la búsqueda de un sentido mayor de sí mismo y de todo, y trata cuestiones más nobles y filosóficas del ser humano.
Décima casa (Medio cielo)
La posición social y la reputación forman parte de la décima casa, que indica la capacidad de integración, estructuración y realización en la sociedad. Así, se la considera la puerta de entrada al estatus de una persona, el lugar en el que diseña, manifiesta y construye su lugar en sociedad.
La décima casa nos informa acerca de todo lo que nos esforzamos por convertirnos, de las opciones profesionales, del primer gran trabajo, de quién queremos llegar a ser. Determinados hitos en la vida de una persona, la fama, el honor o la notoriedad están regidos por la casa 10.
Undécima casa
La undécima casa se relaciona con la amistad, los grupos, las aspiraciones, los ideales y los deseos. Representa las conexiones sociales y las metas a largo plazo. Las amistades que encontramos en la casa 11 están construidas con solidez sobre la complicidad, la confianza y el compromiso.
Esta casa de la carta astral es la puerta de entrada a vivir las esperanzas, deseos y planes de futuro. Se vincula con los proyectos más profundos, que a menudo dependen de líneas de financiación, agencias de desarrollo…
Duodécima casa
La última de las casas de la carta astral se refiere al inconsciente, la espiritualidad, la soledad, el karma y las limitaciones autoimpuestas. Representa nuestras áreas más profundas y nuestro potencial para la transformación espiritual.
Se considera una de las casas más difíciles y complejas para analizar. Es el lugar de los sueños, el subconsciente, lo misterioso y lo oculto a simple vista. Muestra, también, cómo la persona analiza su propia vida y sus pensamientos.
En la duodécima casa se manifiestan las emociones y los recuerdos, lo que la convierte en la casa que hace referencia a los miedos procedentes del inconsciente. No por nada es la última de todas las casas de la carta astral.
Descubre cómo interpretar cada una de ellas y cómo influye en cada persona con el curso de astrología, clave para potenciar tu desarrollo personal.